Las criptomonedas y su daño al medio ambiente, ¿es posible una alternativa sustentable?

En este último tiempo, las criptomonedas están siendo furor en todo el mundo y varios países ya están pensando en su implementación como moneda de uso legal. La puesta en marcha de su producción requiere de un sistema informático donde se integre una red de “minas”, es decir, una serie de unidades de computadoras que sostengan transacciones virtuales que generan un alto consumo energético.

En contraposición al deterioro que produce la minería de criptomonedas en el medio ambiente, una propuesta sustentable comienza a hacerse lugar en el sistema. Si bien Argentina se encuentra muy lejos de ser líder en el desarrollo de granjas de minería a gran escala, a causa de los elevados costos de equipos informáticos, el mundo entero se está preparando para un cambio radical.

En diálogo con Portal Universidad, Antonio Maza, Especialista en Seguridad de la Información e Integrador Tecnológico, aseguró que, a pesar de la volatilidad de esta moneda, “siempre que uno lo vea a largo plazo va a ser rentable: las criptos llegaron para quedarse. Desde el punto de vista del negocio, al ser una inversión de dólares, la tendencia de los países a prepararse para eso es muy alta”.

Específicamente en Latinoamérica, Paraguay es uno de los países con mayor cantidad de minería de criptomonedas y “en Argentina el costo de la energía es mucho menor”. Es decir, nuestro país podría estar preparado para afrontar esta actividad a gran escala sin que el impacto ambiental sea tan profundo, aunque la búsqueda por una opción sustentable siempre sea la mejor solución.

En esta línea de la sustentabilidad, el especialista se encuentra trabajando en un proyecto de conteiners para minería de criptomonedas “que son autosustentables mediante el consumo de energía solar. Estarían ubicados en algunas zonas geográficas específicas donde los períodos de luz sean más largos en diferentes temporadas. La sustentabilidad se puede llevar al mundo cripto, no solo desde el punto de vista de la energía sino de la refrigeración y de otras cuestiones que hacen a aminorar la huella que podamos causar en el medio ambiente”.

La sustentabilidad se puede llevar al mundo cripto, no solo desde el punto de vista de la energía sino de la refrigeración.

En cuanto al funcionamiento del sistema de minería de criptomonedas, “se basa en hardware, es decir, en equipo informático que en algunos casos se arma y en otros se compra enlatado. Cada soporte se conoce como obrero y se lo suma a un pull de minería junto a otros que están en línea“, indicó.

Si bien hay muchos países en los que se desarrollan granjas de minería que tienen dimensiones a niveles industriales, actualmente, en Argentina el sistema es casi hogareño, “hay muy pocos de tamaño industrial. Sin embargo, se está desarrollando un proyecto de ley que busca impulsar la minería en lugares donde el impacto que genere no sea tan alto”, reveló.

Se está desarrollando un proyecto de ley que busca impulsar la minería en lugares donde el impacto que genere no sea tan alto.

Por el momento, una de las principales causas por las que nuestro país no es líder en el desarrollo de estos sistemas es el alto costo de los equipos. “Para Argentina, todo lo que es hardware y equipos informáticos, debido a que cotizan en dólares, cada vez se ve más lejos. De hecho, la semana pasada el dólar blue aumentó casi $10. Para desarrollar el sistema estamos hablando de equipos donde una sola placa cuesta 2 mil dólares y tiene un rendimiento mensual de 100 dólares, son 20 meses de amortizar el gasto inicial”, declaró.

Con respecto a los conocimientos que debe tener una persona que se especialice en el tema, Maza destacó “la configuración de equipos, instalación de sistemas operativos, consumo de energía para el armado de un entorno seguro. La minería es como una maratón, vos tenés un equipo que tiene que rendirte en una carrera que sea prolongada en el tiempo. Si le exigís mucho, puede ser que se te queme alguno de los componentes. Por ende, se recurre al overclocking y, en vez de exprimirlos al máximo, se trata de configurarlos para obtener el mayor rendimiento posible en el tiempo”.