Síndrome de Tourette: “Como muchas de las patologías neurológicas no están aceptadas socialmente”

 

Reflejado en series o películas vemos esta enfermedad que se caracteriza por los tics y movimientos que la persona produce inconscientemente. Si bien lo único que padecen son estas consecuencias, la falta de empatía de la sociedad los deja excluidos de un mundo donde pueden desenvolverse fácilmente.

Portal Universidad dialogó con Iván Roa, Médico Neurólogo, Jefe de Residentes de Neurología del Hospital Privado de la Comunidad y Docente en la Escuela Superior de Medicina de la Universidad Nacional de Mar del Plata, sobre esta enfermedad y explicó que “es un trastorno neuropsiquiátrico que se caracteriza por múltiples tics motores y al menos un tic vocal”

Cuando hablamos de tics nos referimos a “movimientos anormales o sonidos que se caracterizan por ser súbitos, rápidos, recurrentes y estereotipados“, expresó.

Si bien estos movimientos son involuntarios, “los pacientes los pueden reprimir por un momento de forma transitoria. Pero si lo hacen le aparece una tensión interna, un estado de ansiedad muy importante que desaparece y le da alivio cuando hace el movimiento normal”, afirmó el médico.

Los tics pueden ser motores o vocales, los más comunes son: “el parpadeo de ojos, llevarlos para atrás, tocarse la nariz, encoger los hombros, levantar los brazos. Y los vocales son la carraspera de garganta, toser, resoplar. Un solo pequeño porcentaje de los pacientes tiene coprolalia, que es la exclamación de palabras obscenas o que no están socialmente aceptadas”.

El neurólogo declaró que “es una enfermedad que aparece en niños, generalmente entre los 5 y los 18 años. Si bien los síntomas varían entre distintas personas, la mayoría de los pacientes tienen síntomas leves que con el crecer suelen ir disminuyendo, tienden a ir mejorando”.

“No tiene un tratamiento específico, no tiene cura. Pero si se pueden tratar los síntomas y hacer que el paciente tenga una calidad de vida muy buena”, afirmó Roa.

Ante esto, mencionó que “la historia natural de la enfermedad es la tendencia a ir mejorando sola. El paciente con Tourette no tiene ningún tipo de trastorno en la inteligencia, ni en el desarrollo. Son pacientes que no se les altera la expectativa de vida”.

Haciendo referencia a que en muchas ocasiones ocurre una falta de empatía para con estas personas, destacó que “como muchas patologías neurológicas no están socialmente aceptadas”.

“Ni hablar de los que tienen coprolalia, que dicen palabras fuera de contexto. Sin duda los pacientes con estos síntomas tienen un prejuicio en la sociedad“, afirmó.

De esta forma, Roa detalló que “afecta solamente entre el 0,4 y el 3,8% de los chicos entre 15 y 18 años, es una frecuencia muy baja”.

Haciendo hincapié en que es una enfermedad poco común planteó que “tenemos que diferenciar que los tics por sí solos son muy comunes en la infancia y la adolescencia, la mayoría son transitorios y van a ir desapareciendo en la edad adulta”.

“El síndrome de tourette es una enfermedad muy rara que se caracteriza por tics pero no todos los chicos que tengan tics van a tener esta enfermedad. Tienen que tener tics motores, verbales y que duren más de un año”, finalizó.

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