Sadio Mané, el gran emblema del equipo más pobre de Qatar 2022
Por Jimena Troncoso*
A primera vista podrán pensar que se trata tan solo de una historia más de inspiración y sacrificio sobre un deportista con talento que vuelve a su país para consagrarse como un héroe. Y lo es, excepto por una única razón que hace de Senegal y su jugador estrella, Sadio Mané, una historia que deba ser contada: es el país más pobre de los 32 equipos que se disputan en el Mundial de Qatar 2022.
Si bien no va a competir en la copa, ya que días antes de que comience el mundial se quedó afuera por una lesión, su historia merece ser contada por la relevancia que tiene su participación en el equipo senegalés.
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Las secuencias que se nos vienen a la mente cuando pensamos en un grupo de niños descalzos jugando en una cancha diminuta, embarrada y con arcos imaginarios representan la realidad de muchos de los jugadores que hoy integran la selección senegalesa. Y aquí es cuando la frase cliché de “la esperanza es lo último que se pierde” podría definir perfectamente la historia de vida de Mané.
Los inicios de su ilusión por convertirse en futbolista se remontan a hace 20 años, cuando Senegal llegó a los cuartos de final durante la Copa del Mundo 2002. Sin embargo, la pobreza que abundaba en su pueblo natal, Bambali, hacían que los primeros pasos en el fútbol parecieran los de un gigante. A todo esto, la historia de su familia contrarrestaba cualquier fantasía que tienen la mayoría de los niños a esa edad.
Con un padre fallecido a los 7 años, debido a la nula infraestructura sanitaria en el pueblo, la insistencia de la familia por continuar sus estudios y los sueños intactos, Mané se escapó de su hogar en la búsqueda desesperada por un futuro cuya sentencia parecía ser negativa. Tenía 15 años y lo único que quería era ser futbolista profesional.
Kilómetros, años y sueños más tarde lo cumplió. La historia de superación se cumplió cuando logró la primera estrella para su país en la Copa Africana de Naciones, venciendo a Egipto por penales y anotando el gol decisivo. Pero eso no fue todo, porque luego de mucho esfuerzo y sacrificio se convirtió en el único máximo goleador en la historia de la Selección de Senegal.
Sadio Mané es ahora el único máximo goleador en la historia de la Selección de Senegal:
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Mané trascendió barreras sociales, culturales y económicas, pero sobre todo geográficas, porque hace algunos meses comenzó su contrato en el Bayern München, equipo alemán. Sin embargo, por más que el éxito mundial continúe siendo uno de los pilares de su carrera, el deportista profesional nunca se olvidó de sus orígenes.
La choza con techo de chapa en la que nació, ubicada en la postergada aldea de Bambali, hoy es un hogar donde viven 40 personas con todas las comodidades. Además, en el pueblo hay un hospital, una oficina de correos, una estación de servicios y los alumnos de la escuela cuentan con computadoras personales. Así es como el fútbol fue el motor para cambiar la vida de toda una comunidad entera. Mané se fue para salvar a su gente y le dio una oportunidad a quienes ni siquiera creían que iban a llegar a tenerla.
“Me crié en un lugar donde no les gustaba el fútbol y jugué descalzo en la calle hasta los quince años. Se me consideraba el mejor jugador del pueblo, pero nadie en mi familia quería que fuera futbolista. Pero yo estaba totalmente convencido de que cuando me fuera podría serlo. Lo único que me preocupaba era cómo”, afirmó Mané en su documental Made in Senegal.
“Se me consideraba el mejor jugador del pueblo, pero nadie en mi familia quería que fuera futbolista”, comentó Mané.
“¿Por qué querría tener 10 Ferraris, 20 relojes con diamantes y dos aviones? ¿Qué harían estos objetos por mí y por el mundo?”, se preguntó en una entrevista con TeleDakaren 2019. A diferencia de la mayoría de los jugadores de los deportes que compiten en grandes ligas y que tienen una gran cantidad de inversiones por parte de entidades privadas, Mané construyó, con los pies sobre el verde césped, un futuro para su comunidad.
En la producción audiovisual aseguró: “He tenido hambre. Tuve que trabajar en los campos. Jugué al fútbol descalzo. Hoy, con lo que gano a través del fútbol, puedo ayudar a mi gente. No necesito mostrar autos de lujo, casas de lujo, viajes o menos aún aviones. Prefiero que mi gente reciba un poco de lo que la vida me ha dado”. Sin embargo, Mané es mucho más que el referente de su pueblo, es el héroe, el símbolo y su orgullo.
Senegal en números
Derrotaron al entonces campeón, Francia, en Japón 2002. Luego de ausentarse por tres ediciones consecutivas, clasificaron para Rusia 2018. El 29 de marzo de este año quedaron seleccionados para Qatar 2022, obteniendo así su tercera participación en una Copa del Mundo. Actualmente, es la selección de la Confederación Africana de Fútbol con la posición más alta en la clasificación de la FIFA. Senegal es eso y mucho más, pero también es el país más pobre de todos los que participan en este Mundial.
En términos concretos, el país africano cuenta con una población de más de 17 millones de habitantes y tiene una superficie de casi 197 mil km2. Siendo la economía número 107 por volumen de PIB, su deuda pública en 2021 fue de 17.085 millones de euros, con una deuda del 73,16% del PIB. Como su deuda por habitante es de 994 euros, los senegaleses tienen un bajísimo nivel de vida en relación a los 196 países del ranking de PIB per cápita. Esto mismo se traduce en el Índice de Desarrollo Humano, elaborado por las Naciones Unidas para medir el progreso de un país, que indica que los habitantes están entre los que peor calidad de vida tienen del mundo.
Al menos cuatro de cada diez habitantes viven bajo el umbral de la pobreza.
En contraposición a todo lo anterior, Senegal se caracteriza por su estabilidad política: nunca tuvieron un golpe de Estado. Si bien el contexto africano tiene una historia cargada de turbulencias, violencia terrorista o regímenes autoritarios, el país evolucionó de un régimen socialista de partido único a una democracia multipartidista con dos alternancias pacíficas, una en 2000 y otra en 2012.
Entonces, de los 32 equipos que participan en Qatar 2022, Senegal es el más pobre en cuanto a lo económico, pero no lo es si hablamos del talento deportivo. Dentro del Mundial, en la última fecha del Grupo A se enfrentará al seleccionado de Ecuador de Gustavo Alfaro, el martes 29 a las 12 hs en el remodelado Khalifa Internacional, con la esperanza de quedar entre los 16 mejores equipos de la competición.
*Estudiantes del MediaLab, primer Laboratorio de Redacción para Medios Digitales. Se trata de un sistema experimental que consiste en el trabajo periodístico, de producción propia, que desarrollan alumnos del Taller de Redacción para Medios Digitales, correspondiente a la Tecnicatura de Periodismo Digital que se dicta en la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
