Programa Integral de Políticas de Género: “Se busca trabajar con varones para poder poder abordar la transformación subjetiva de quien ejerce la violencia”

Regularmente, desde el Programa Integral de Políticas de Género se desarrollan distintos dispositivos dirigidos a varones que ejercen violencia. Para conocer con mayor profundidad las características de los conversatorios y las actividades que se abordan desde el programa para atender esta problemática, desde Portal Universidad nos pusimos en contacto con Lucas Serra, Licenciado en Sociología y especialista en Violencia de la Facultad de Ciencias de la Salud y Trabajo Social de la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMDP).

Respecto de los dispositivos, Serra dijo: “La propuesta surgió del Programa Integral de Políticas de Género de la universidad, desde el que hace ya varios años trabajamos fuertemente el eje de masculinidades. La misma se inserta en el trabajo que venimos realizando desde el programa, pensado en convocar a los demás equipos que intervienen en la ciudad con relación a  las violencias masculinas. De los conversatorios participan las compañeras del patronato de liberados, el equipo de la Dirección de Políticas de género que trabaja con derivaciones del fuero de familia, de otros efectores como puede ser los Centros de Atención Primaria de la Salud (CAPS), centros educativos, movimientos sociales y también varones que se acercan espontáneamente”.

Hablamos de  varones que ejercen y no de varones violentos, porque partimos de la idea de que esas conductas que han sido aprendidas pueden ser transformadas.

Asimismo resaltó que “existe otro dispositivo que tiene que ver con la comunidad universitaria, denominado “interpelando masculinidades”, que es dirigido a varones que ejercen o han ejercido violencia de género y pertenecen a la comunidad universitaria. El objetivo es reflexionar sobre los abordajes que tienen que ver con las masculinidades, el eje masculinidades y violencia y trabajar con varones para poder abordar la idea de la transformación subjetiva de quien ejerce violencia. Esto se trabaja con una lógica protectora hacia la mujer y a la vez también se busca poder dar un horizonte de transformación a esa persona que ejerce la violencia. Por eso hablamos de  varones que ejercen y no de varones violentos, porque partimos de la idea de que esas conductas que han sido aprendidas pueden ser transformadas”, aseguró.

Foto: Convocatoria al conversatorio realizado el pasado 6 de diciembre. Fuente: UNMDP.

En ese mismo sentido, Serra explicó que los conversatorios tienen que ver con pensar las experiencias de los dispositivos, de los profesionales que trabajan y de las personas que se inscribieron. Sobre este aspecto dijo: “Generalmente quienes se inscriben a los conversatorios o a las charlas son más mujeres que varones. Los equipos que trabajan con los varones tienen siempre una derivación previa, que puede ser de la justicia, de la institución, de un movimiento social o también puede ser orientada por la pareja a partir de poner un límite a las situaciones de violencia”.

“Puede ser a partir de un espacio comunitario también, donde se pone un límite que tiene que ver con las feminidades o feminismo organizado, que plantean esta alternativa al varón que participa de este espacio y a partir de ahí se hacen entrevistas iniciales con ese varón, para tener una aproximación, para intentar observar el grado de responsabilidad que tiene sobre la violencia que ha ejercido”, agregó.

Es un proceso donde la incomodidad de los varones en un principio es muy notoria, porque no se sienten a gusto de estar en ese espacio. Sin embargo, conforme avanzan los encuentros se va construyendo una demanda subjetiva.

Respecto de la dinámica de estos encuentros donde se persigue la transformación de la conducta de estos varones, Serra dijo: “Es un proceso donde la incomodidad de los varones en un principio es muy notoria, porque no se sienten a gusto de estar en ese espacio. Sin embargo, conforme avanzan los encuentros se va construyendo una demanda subjetiva, van construyendo un vínculo, pueden avanzar en ciertas reflexiones y construir de una forma dialógica un proceso reflexivo y de responsabilización más profundo”.

Por otro lado, consultado sobre los efectos que tienen estos dispositivos expresó: “Siempre hay un déficit desde la política pública en torno a la evaluación. No tenemos un número preciso o estadística sobre los varones que logran transformar su conducta pero si observamos lo que podríamos llamar reincidencia tiene índices notoriamente más bajos en varones que participaron de estos dispositivos. La dificultad más grande no es tanto cómo observar la transformación una vez que pasó el proceso, sino que atraviese todo ese proceso, esa es la tarea más compleja, lo que nosotros llamamos como la adherencia al dispositivo. Muchos varones que han llegado a los dispositivos con obligación legal de permanecer, una vez vencido el plazo han decidido permanecer y eso es un indicador de que se ha construido una conciencia”.

Muchos varones que han llegado a los dispositivos con obligación legal de permanecer, una vez vencido el plazo han decidido permanecer y eso es un indicador de que se ha construido una conciencia.

“En general, a los meses de estar en el dispositivo ya aparece una noción mucho más fuerte de la impugnación sobre la violencia física y en adelante se construye todo lo relacionado a otras violencias, violencias simbólicas o micromachismos, que es mucho más complejo porque están más arraigados”, concluyó.

Finalmente, Serra precisó que los interesados en informarse respecto de las acciones que se llevan a cabo desde Programa Integral de Políticas de Género y el dispositivo “interpelando masculinidades”, pueden hacerlo a través de la página de instagram @generounmdp. Asimismo, para lo que tenga que ver con consultas o propuestas con relación al trabajo que se realiza en la UNMDP explicó que se puede escribir por mail a masculinidadesunmdp@gmail.com.