Toma de terrenos: arquitectos no ven que la municipalidad tenga “un interés sincero” en buscar soluciones de fondo
Una nueva toma de tierras tuvo lugar en un predio de cuatro hectáreas en el barrio Las Heras, sobre la avenida Fortunato de la Plaza (ex 39) entre Vignolo y Olazar, a metros de donde el año pasado ocurrió un suceso similar. De la toma participan más de 30 familias que aseguran no tener vivienda y que comenzaron a demarcar lotes y montar carpas y casillas para instalarse en el lugar y construir viviendas.
Para conocer las razones detrás de la crisis habitacional que motiva estos procesos de tomas de tierras en la ciudad, desde Portal Universidad nos pusimos en contacto con Diego Domingorena, Presidente del Colegio de Arquitectos distrito IX.
Consultado respecto del panorama local frente a esta crisis del hábitat, Domingorena dijo: “En realidad es una situación recurrente que obviamente año a año va creciendo y se manifiesta a través de estas situaciones de tomas de tierras por parte de la gente que no tiene donde morar, no tiene donde residir. Nosotros tenemos datos oficiales desde el Registro Nacional de Barrios Populares (Renabap) que dan cuenta que en la Provincia de Buenos Aires tenemos un déficit de 2 millones de viviendas. Si uno lo cruza con la cantidad de habitantes que tiene la provincia se da cuenta del alto porcentaje que eso significa, es una barbaridad. En cuanto a la ciudad de Mar del Plata, se registran alrededor de 70 asentamientos con casi 13.500 personas que viven con déficit habitacional grave. Hablamos de hacinamiento sin acceso a servicios básicos, en situaciones extremas, esos son los datos que estamos manejando”.
Más alla de los datos aportados por el Renabap, un relevamiento estadístico realizado desde el Polo Obrero a fines de 2022 reveló que en Mar del Plata existen más del doble de los asentamientos reconocidos por el estado y detalló que el déficit es de 20 mil viviendas.
En cuanto a los pasos que hay que dar para comenzar a solucionar el problema, Domingorena dijo: “El punto de partida para resolver el tema de la vivienda y el hábitat es el manejo de la tierra, si uno no tiene tierra disponible para realizar viviendas de interés social, no puede comenzar a planificarse nada. Mar del Plata es una ciudad que no tiene un registro de tierras, al menos no es público. No hay herramientas que puedan manejar esas tierras y hace dos años que está presentado en el Concejo Deliberante el proyecto de ordenanza del conformar el Consejo Local de Vivienda, Hábitat y Derecho, contemplado por la Ley provincial 14.449 de Acceso Justo al Hábitat. Esa ley promueve un montón de herramientas que pueden utilizar los municipios para generar tierra, vivienda, intercambios urbanos. Es una herramienta muy potente y que este municipio no la ha instrumentado, como sí lo han hecho muchos municipios de la Provincia de Buenos Aires”.
“Es un lugar donde se juntan organizaciones sociales, instituciones y el municipio y se toman decisiones respecto de temas urbanos y su planificación. Por ejemplo cuando algún desarrollador decide realizar algún proyecto y el municipio tiene que otorgar alguna excepción se negocian intercambios de tierras que sirvan para estas políticas públicas de vivienda. Hay infinidad de herramientas legales para gestionar estas tierras que tanto necesita Mar del Plata”, añadió.
Hay infinidad de herramientas legales para gestionar estas tierras que tanto necesita Mar del Plata.
Por otro lado se refirió al efecto que tiene la dificultad para alquilar en la ciudad sobre esta problemática y dijo: “El tema de alquileres con los costos, la falta de oferta y la gran cantidad de demanda es totalmente proporcional a este problema y no solo afecta a los sectores vulnerables sino que está afectando a sectores bajos y medios. El tema del alquiler, es un problema que no afecta solamente a Argentina, está teniendo consecuencias a nivel mundial y se han vivido situaciones en Europa. Hubo un caso importante en Berlín, donde el gobierno municipal tuvo que expropiar viviendas ociosas para poder regular el precio de los alquileres. En Portugal se restringió el alquiler de viviendas al turismo para preservar un costo accesible a ciudadanos de aquel país y acá en Argentina tenemos una problemática muy importante que se mezcla también con los altos costos de construcción que existen en el país”.
“Hoy por hoy la construcción es un producto suntuoso con costos que se fueron por las nubes. Hace unos años se decía que había tocado su punto más bajo, de alrededor de 400 dólares el metro cuadrado y hoy en día retomó su costo histórico y está por encima de los 800 dólares el metro cuadrado. Si trasladamos ese costo a pesos es una situación inalcanzable para la mayoría de los argentinos”, agregó.
Soluciones creemos que hay pero parece que falta un poco de imaginación y voluntad.
Asimismo, Domingorena agregó que podrían aplicarse estrategias para morigerar esta situación y dijo: “El Colegio de Arquitectos forma parte del Foro de la Construcción y entre tantos temas que se tratan, en la última reunión se habló de este tema. De la misma participaron integrantes del foro junto con el Gobernador Axel Kicillof y se propuso llevar adelante políticas para convertir los planes sociales, intentar que la gente se inserte en algunas empresas y ese costo del plan social pase a ser parte del sueldo de la empresa que le paga al trabajador. Sería importante utilizar esa masa de recurso humano, sumado al aporte del Estado para lo que son los materiales y generar a través de cooperativas la autoconstrucción por ejemplo. Soluciones creemos que hay pero parece que falta un poco de imaginación y voluntad, mezclado también con el clima político que vivimos que dificulta en este momento la generación de estos proyectos”.
Solucionar el déficit habitacional va más allá de proporcionar una vivienda
No es lo mismo hablar de hábitat que de vivienda. Para explicar la diferencia entre estos dos conceptos, Domingorena dijo: “Hace unos cuantos años que se deja de hablar de la palabra vivienda como una solución para el ser humano. El concepto antiguo de vivienda, de que vos armas un barrio y simplemente con dar viviendas solucionás los problemas de la gente quedó demostrado que es incorrecto. El mejor ejemplo es el barrio Centenario. Cuando hablamos del hábitat de una persona vamos más allá de un lugar donde morar, tiene que ver con el ámbito, son la urbanización, el acceso a los servicios, la infraestructura. Es un concepto general que va más allá de simplemente tener una vivienda”.
“Hay gente que hoy por hoy tiene su vivienda pero el concepto de hábitat que lo rodea es totalmente inverosímil, no cumple su función. Hace unos días desde la UNMDP se organizó un encuentro con distintas instituciones, ONGs y referentes de la ciudad donde se contaron situaciones que viven los vecinos en algunos barrios. Hay zonas de Mar del Plata donde las madres tienen que llevar a sus hijos a caballito hasta el colegio porque no hay vereda y tienen que caminar sobre el barro. Lugares donde no acceden ambulancias ni transporte público, ese es el déficit de hábitat que tenemos más allá del de vivienda”.
¿Qué medidas toma el municipio para resolver esta situación?
En cuanto a las medidas que toma el municipio, Domingorena expresó: “Desde el colegio somos bastante críticos. Hay varios planes del Gobierno Nacional y Provincial que van en línea con solucionar estos problemas y sabemos que el municipio no se alinea con esas situaciones, no participa, no presenta proyectos. No vemos que desde municipio exista un interés sincero sobre la solución de este problema. No hay políticas activas de tierra ni de generación de viviendas y tampoco existe un acople a planes y programas que se ofrecen desde provincia y nación”.
No vemos que desde municipio exista un interés sincero sobre la solución de este problema.
“En cuanto a las palabras del intendente donde califica a quienes toman tierras de delincuentes, el derecho al acceso a la vivienda está en la Constitución Nacional. Si una persona no tiene ese derecho y busca la solución que está a su alcance para solucionar algo tan grave como buscar un lugar para vivir, no creo que cumpla con la descripción de delincuente. Pueden existir casos donde esta situación se mezcla con personas que se aprovechan de los vulnerables, eso es posible, pero con simplemente acusar no se aporta ninguna resolución a la problemática. Buscar un lugar donde vivir no te convierte en un delincuente”, concluyó.