¿Por qué es fundamental promover la alfabetización digital?

Fuente: Télam.

 

De acuerdo a los últimos datos publicados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), Argentina cuenta con un grado de penetración de servicios de internet superior al promedio del resto de Latinoamérica, con un 90,4% de la población que cuenta con acceso a internet (contra el 72%). Asimismo, el 64,2% de los hogares cuenta con acceso a una computadora y el 88,2% de las personas accede al servicio a través de un celular.

Si bien el estado de la infraestructura en el país no es malo, la baja calidad de las conexiones, la existencia de vastas zonas sin cobertura y el costo elevado de los productos tecnológicos retrasa la inclusión digital de los sectores económicamente postergados de la población y favorece la profundización de desigualdades.

Sin embargo, la inclusión digital va más allá de conectar a la totalidad de la población con servicios de buena calidad y garantizando la provisión de los elementos tecnológicos necesarios. Para lograr esta inclusión es necesario hablar de Alfabetización Digital, es decir facilitar la adquisición de las habilidades necesarias para ser competente en el uso de las nuevas tecnologías y de este modo permitir a todos los ciudadanos contar con las mismas oportunidades a la hora de acceder al mundo digital conectado. Quienes no estén alfabetizados digitalmente, no solo no podrán avanzar a la misma velocidad que el resto en términos de productividad y eficiencia, sino que gradualmente ingresan en un proceso de aislamiento social. 

Para profundizar sobre este tema, desde Portal Universidad nos pusimos en contacto con Federico Cermelo, director del Observatorio de Familias y Juventudes de la Cámara de Diputados de la Nación, que se encuentra al frente de una campaña de alfabetización digital organizada por la Secretaría de Energía que tiene por objetivo que ningun vecino se quede sin inscribirse al Registro de Acceso al Subsidio Energético (RASE) .

Respecto de la importancia de realizar campañas para reducir la brecha digital, Cermelo dijo: “Desde el Observatorio se viene trabajando hace tiempo sobre estas cuestiones que tienen que ver con la ciudadanía digital: todos somos ciudadanos digitales. Hoy en día, casi todas las actividades de la vida real pueden realizarse de manera virtual. Podemos trabajar, estudiar y vincularnos a través de esta tecnología pero por otra parte también podemos ser víctimas de engaños o de distintos delitos sobre los que es necesario advertir a la población”.

Fuente: Télam.

“Asimismo, nos encontramos con la realidad de que muchos trámites que tienen que ver con el Estado y el acceso a políticas públicas se vuelven progresivamente virtuales. Esto tiene muchas ventajas que hacen a la sustentabilidad y que posibilitan a las personas acceder a los mismos desde sus casas, pero trae aparejada la problemática de que existen muchas personas a las que les cuesta más seguirle el paso a ese aumento de la virtualidad. Por eso es fundamental avanzar con la realización de campañas que permitan acompañar a los vecinos y brindarles herramientas para manejar un celular o una pc”.

Otro aspecto complejo de la irrupción de la digitalización es la existencia de adultos que, aunque estén alfabetizados y formados, no cuentan con los conocimientos mínimos sobre nuevas tecnologías. En este caso, se habla de la necesidad de realizar una realfabetización, en la que se renuevan conceptos y competencias relacionadas con el mundo digital para conseguir ciudadanos más autónomos. Sobre este aspecto, Cermelo dijo: “Es importante destacar que por un lado tenemos una brecha tecnológica, de poblaciones que no tienen acceso a la tecnología y la conectividad, pero también contamos con una brecha generacional en la que el sector de adultos mayores se ve especialmente afectado. Hablamos de personas que no han tenido la posibilidad de crecer con un celular o con una pc. Incluso en aquellos casos en los que sí pueden acceder, todavía no han podido acostumbrarse a los lenguajes que maneja la tecnología”.

Contamos con una brecha generacional en la que el sector de adultos mayores se ve especialmente afectado.

“Los jóvenes en general acceden a un teléfono a edades cada vez más tempranas y aprenden a usar la tecnología mediante el juego y en un entorno de comunicación con sus pares. Uno cuando es chico aprende, tiene una capacidad de aprendizaje y una plasticidad mucho más grande y flexible. Por eso tienen un rol fundamental a la hora de acompañar a los adultos en estos procesos, pero eso no significa que no estén exentos de encontrarse con dificultades para lidiar con los contenidos que circulan por las redes. La alfabetización tiene que atravesar transversalmente a estos sectores”, destacó.

En este mismo sentido, Cermelo  explicó que “la pandemia generó una aceleración de todo lo que tiene que ver con las nuevas tecnologías y junto con todos los aspectos positivos que trajo, también trajo un auge de delitos virtuales, sobre todo con problemáticas para las infancias donde crecieron muchísimo los casos de bullying, de grooming, ciberacoso y también estafas a adultos. La alfabetización es fundamental para conocer esos riesgos, pero también estamos en una etapa de transición donde  todavía estamos descubriendo el costado b que tiene la virtualidad: si todo lo bueno de la vida diaria se fue a la virtualidad, podemos presumir que lo malo también y sobre ese aspecto hay mucho para trabajar”.

Si todo lo bueno de la vida diaria se fue a la virtualidad, podemos presumir que lo malo también y sobre ese aspecto hay mucho para trabajar.

“Por todo esto que menciono es tan importante hacer un aprendizaje de abajo para arriba, con el nivel de responsabilidad que todos tenemos que tener. En la pandemia se les pedía a los jóvenes que vayan a hacer las compras para no exponer a sus abuelos. Hoy hay que ayudarlos del mismo modo a transitar por el mundo digital. Y los adultos por su parte tienen que acompañar a los jóvenes y ayudarlos a reconocer los riesgos que suponen ciertos consumos y actividades en el mundo digital”, concluyó.

Campaña de orientación al vecino para inscribirse a los subsidios

Respecto de la campaña que llevan adelante en Mar del Plata desde la Secretaría de Energía, Cermelo dijo: “Comenzamos con esta campaña en distintos barrios de la ciudad. Establecemos vínculos con centros culturales y sociedades de fomento del centro y la periferia donde vemos algunas dificultades relacionadas con la realización del trámite para inscribirse al RASE de manera virtual. Si bien es un trámite sencillo, por desconocimiento, muchas personas no lo realizan”.

En ese sentido destacó que “para agilizar el trámite, resulta necesario concurrir a los encuentros antes del 31 de mayo con DNI en mano y las últimas boletas de luz y gas natural. Muchos adultos mayores no conocen la dinámica del uso digital y nosotros les explicamos cómo gestionarlo. Nosotros estamos en la rambla, en la peatonal, tenemos puntos itinerantes y tratamos de ir a distintos sectores donde hay aglutinación de vecinos para asesorar a quienes tengan dificultades con el trámite”, aseguró.

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