Un problema sin resolver: El balance del transporte público y privado en Mar del Plata
Por Lautaro Pérez y Giovanni Spinelli para el #MediaLab de Portal Universidad
La gestión de Guillermo Montenegro en el tramo final de su mandato deja un panorama complejo en materia de transporte. El aumento de tarifas, el reclamo recurrente de los marplatenses sobre la precariedad de las unidades, la demora en proyectos estructurales y los conflictos sindicales se combinan en un diagnóstico que exige respuestas urgentes.
En términos de movilidad urbana, cuando se habla de la situación actual del transporte tanto público como privado, muchos vecinos, sindicatos y agrupaciones sociales remarcaron una falta de diálogo, control e inversión por parte del ejecutivo municipal, que no solo afecta a los trabajadores que se encuentran dentro de las empresas o sindicatos, sino también a los usuarios y pasajeros marplatenses que usan estos servicios cotidianamente y muestran su disconformidad con el mismo.
El aumento tarifario en el Transporte Público
Uno de los ejes más conflictivos en lo que va del último mandato del intendente fue el incremento sostenido del boleto de colectivo, habilitado por el Concejo Deliberante mediante la delegación de facultades a Guillermo Montenegro. Esta decisión, si bien está legalmente autorizada, generó fuertes críticas por parte de sectores opositores, las empresas, los sindicatos y usuarios que consideraron que se evita el debate democrático.
Desde que se le delegaron dichas facultades al mandatario, se registraron cuatro aumentos en su último año de gestión: en marzo de 2024, la tarifa plana pasó de $297 a $750. Solo tres meses después, en junio, aumentó a $940. En octubre escaló a $1.180, y en abril de 2025 alcanzó los $1.360. Este esquema de ajuste periódico superó el 350% anual.


Ranking actualizado de las tarifas de transporte urbano más elevadas del país, realizado por AAETA. Fuente: InfoBae
A su vez, las recurrentes actualizaciones en las tarifas tampoco fueron bien recibidas por los usuarios, quienes expresan mayoritariamente que la misma no fue acompañada por mejoras visibles en el servicio, y que, luego del último aumento, la ciudad cuenta con uno de los boletos de colectivo más caros del país. Actualmente, Mar del Plata se encuentra novena en un ranking realizado por la Asociación Argentina de Empresarios del Transporte Automotor (AAETA), la cual muestra las ciudades con las tarifas más elevadas del país.
Impacto socio-económico de la suba de tarifas en transporte publico
A nivel nacional, en base a información suministrada por el Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE), trabajadores del Transporte indicaron que en 2024 había 71,55 millones de pasajeros registrados, de los cuales: el 20,59% viajó gratis (estudiantes, docentes y personas con discapacidad), el 39,92% abonó con tarifa social, y solo el 39,49% pagó el boleto completo.
A pesar de que, según los datos, menos de la mitad de los usuarios registrados abonaron el precio del boleto completo, si una persona en nuestra ciudad toma dos colectivos al día durante todo el mes, estaría destinando en transporte público un 26,48% del Salario Mínimo Vital y Móvil (SMVM), luego de que este sea fijado en $308.200 para el mes de Mayo.

Por su parte, diversas organizaciones vecinales denunciaron que las subas de los últimos meses no respetaron criterios de gradualidad y que la relación que existe entre la evolución del costo del boleto y la del SMVM se desbalanceó por completo.
Reclamos respecto a la calidad del servicio
De forma reiterada, la calidad del servicio fue una de las principales críticas por parte de los usuarios. En algunos casos, se registraron demoras superiores a 50 minutos en algunas líneas como la 501, 593 y 554. Por otro lado, algunas personas denunciaron que muchas unidades circulaban sin aire acondicionado ni calefacción, con asientos, techos o pisos rotos, además de falta de limpieza.
La presidenta de la Sociedad de Fomento Playa Serena, María Inés Benítez, también manifestó algunas de las vivencias de los vecinos del barrio, los cuales utilizan la línea 221 con frecuencia, y llegaron incluso a mojarse dentro de los mismos colectivos: “las unidades están totalmente obsoletas”, afirmó. Asimismo, desde la asociación vecinal realizaron numerosas denuncias por el estado peligroso de algunos coches: “muchas unidades tienen muchos vidrios rotos, el techo con agujeros, y cuando llueve es una catarata”.
Desde la asociación vecinal también reclaman el cambio o la reparación de las unidades en mal estado, aunque desde el municipio les han comunicado que la línea 221 no depende de ellos. Sin embargo, vecinos de Playa Serena y de la zona sur de la ciudad solicitan que se le quite el pliego del transporte al actual dueño: “Estuvo en una causa federal por evasión y por tener choferes fantasmas”, afirmó la presidenta de la asociación vecinal.

Por último, Benítez también reclamó la implementación de la tarjeta sube en la línea 221: “Con el último aumento, el boleto está $1360, pero como abonas en efectivo, muchas veces te redondean a $1500”. A su vez, sostuvo qué “todas estas cuestiones fueron comunicadas en el 2021 cuando se realizó una audiencia por un nuevo pliego del transporte”, el cual nunca ocurrió, y los vecinos continúan esperando.
A pesar de la problemática en zona sur, los reclamos en el centro de la ciudad también son numerosos. Una pasajera habitual es Adriana, quien al preguntarle por la calidad actual del servicio, manifestó qué “No hubo ninguna mejora, yo sigo teniendo que esperar media hora un colectivo, y los sábados o domingos tenés que esperar una hora”. A su vez, expresó con enojo qué ”al menos, si te van a aumentar, que te den un buen servicio”. Adriana es una de las tantas personas que toma dos o tres colectivos por día, y sostuvo que “es un presupuesto; si sacás la cuenta a fin de mes, es mucha plata”.
Cambio en las concesiones y el rol de los subsidios
Tras la caducidad de las concesiones de las empresas 25 de Mayo y El Libertador, el servicio quedó en manos de cinco firmas: Peralta Ramos, 12 de Octubre, Asta- Piccini, Atlántida y 9 de Julio. La Cámara Marplatense de Empresas del Transporte Automotor de Pasajeros (Cametap), quien se encarga de agruparlas, solicitó aumentos tarifarios de hasta un 38% durante el año pasado. 
Por otra parte, Mar del Plata recibió a mediados de 2024 un aumento en los subsidios destinados al transporte del 110%, llevando el mismo a $722 millones. Sin embargo, desde la Cametap aseguran que la cifra representa solo el 50% de los montos necesarios, según cálculos empresariales. El sistema depende de este ingreso para sostener la frecuencia y pagar sueldos. Por su parte, el Concejo exige a las empresas la presentación de un nuevo pliego licitatorio, actualizado y con garantías de control.
Proyectos sin concretar en materia de Movilidad y Recorridos

Durante marzo de este año, la Municipalidad impulsó la extensión del recorrido de la línea 533 hacia el barrio Virgen de Luján, sumando 1,7 km y beneficiando a una zona hasta entonces con escasa cobertura.
El proyecto fue bien recibido, pero se reclamó su ejecución total y el cumplimiento de las frecuencias. Además, la tan promocionada ‘Línea Anular’, anunciada en 2023 como un servicio moderno con boleto combinado y unidades nuevas, aún no fue puesta en funcionamiento completo. Desde la oposición se acusó a Guillermo Montenegro de hacer anuncios de campaña sin implementación real. El proyecto pretendía optimizar la conectividad entre barrios periféricos sin pasar por el centro, pero sigue en etapa piloto.
Conflictos y Ordenanzas Municipales en el transporte privado de pasajeros
Con respecto a las tarifas de taxis en la ciudad, éstas también experimentaron incrementos significativos. En junio de 2024, el Concejo Deliberante aprobó un aumento del 43% en la tarifa diurna, elevando la bajada de bandera de $975 a $1.395 y la ficha de $65 a $93. Posteriormente, en noviembre del mismo año, se autorizó un nuevo incremento del 34,3%, llevando la bajada de bandera diurna a $1.875 y la ficha a $125.
Estos ajustes también incluyeron un recargo nocturno del 20%, situando la tarifa nocturna en $2.250 para la bajada de bandera y $150 por ficha. En la siguiente representación gráfica se puede observar cómo evolucionó la tarifa de la bajada de bandera diurna entre enero de 2024 y mayo de 2025, reflejando los principales aumentos autorizados en ese período.

Estos aumentos tarifarios coincidieron con una notable disminución en la demanda del servicio de taxis. Según informes, en septiembre de 2024 la cantidad de viajes en taxi disminuyó en un 50% en Mar del Plata, atribuida tanto a la crisis económica como a la competencia de plataformas digitales como Uber, Cabify y DiDi. Los usuarios, al encontrarse con tarifas más altas, optaron por alternativas más económicas y accesibles, afectando la rentabilidad de los taxistas locales.
Ante esta situación, el sector de los choferes expresó su preocupación por la sostenibilidad del servicio, además de proclamarse en contra de las aplicaciones de transporte.
La mirada de los trabajadores del transporte privado
Héctor Cejas, conductor de taxi desde hace más de 15 años, manifestó que “aflojó bastante el trabajo, la gente desgraciadamente prefiere pagar un poco menos y arriesgarse a ir en un transporte que no tiene ni seguro”.
Por otra parte, Omar, compañero de Héctor en la misma parada de taxis, también se manifestó en contra de estas aplicaciones: “Nosotros antes, en esta parada, hacíamos 15 viajes por día, ahora con suerte hacemos 7”. Sobre los choferes de las apps, sostuvo qué “yo los veo desde acá como levantan pasajeros, y es algo ilegal. Cuando termina el día a mi me faltan 25 o 30 mil pesos, y me lo sacaron ellos, me metieron la mano en el bolsillo”.
Desde el Sindicato Marplatense de Peones de Taxi (SIMPETAX), su representante Miguel Alberto Rodríguez fue contundente al expresar su rechazo a las plataformas de transporte digital como Uber, Cabify y DiDi: “Nosotros estamos totalmente en contra. Hay una ordenanza que las prohíbe, pero el intendente Montenegro no la hace cumplir. Se jacta de ser un hombre de la ley, pero mira para otro lado”. A su vez, Miguel hace referencia a que las aplicaciones no tributan, no tienen autos habilitados, seguro para las personas transportadas, ni carnet profesional.
Además, Rodríguez agregó: “Nosotros no tenemos ningún tipo de contacto con Montenegro. ¿Para qué? Si hace la vista gorda. Dicen que controlan un montón de autos por día, pero es mentira. Todo eso es mentira para justificar las apelaciones que hemos hecho en la Justicia. Hay una desilusión tremenda, la gente ya no tiene ganas de hacer nada”.
El aumento de las tarifas, junto con la caída en la demanda y la competencia de las aplicaciones, generaron un escenario difícil para los taxistas de Mar del Plata. Además, la falta de una regulación clara sobre estas plataformas digitales profundizó aún más la competencia, reduciendo la cantidad de viajes diarios y afectando la estabilidad del servicio tradicional.
Regulación de Plataformas
Una de las situaciones que generó mayor conflicto entre los taxistas y el ejecutivo municipal fue la libre circulación de vehículos pertenecientes a aplicaciones de traslado. Si bien el Concejo mantiene vigente la ordenanza No 23.928, que prohíbe la prestación de servicios sin habilitación municipal, muchos choferes de taxi y remís han declarado que dicha ordenanza no se está cumpliendo y que, desde el Municipio, tampoco hay nadie que se encargue de regular o sancionar su incumplimiento.
Al consultarle a Héctor sobre esta problemática que existe entre el municipio y los taxistas, comentó qué “hay un grupo que está actuando mediante abogados, pero hace meses que no pasa nada, no avanza”. A su vez, fue muy tajante con el intendente Montenegro: “Él decía que estaba haciendo algo, y mientras daba una conferencia en el COM, la camioneta de Cabify estaba dando vueltas por Güemes”.
Por otro lado, en 2024 se presentó un proyecto para despenalizar temporalmente a los choferes de aplicaciones mientras se discutía y se desarrollaba un nuevo marco regulatorio. La iniciativa, respaldada por el bloque oficialista, quedó suspendida tras la presión de los sindicatos de taxis y remises, que acudieron a la justicia para impedir su avance.
La necesidad de adaptarse a un nuevo entorno
Debido al impacto que tuvo en la economía de los choferes privados, algunos taxistas decidieron comenzar a trabajar para estas nuevas aplicaciones, y son cada vez más los conductores de taxis que se incorporan a estas plataformas para poder seguir manteniéndose económicamente. Para SIMPETAX, el problema no es la competencia en sí, sino las condiciones desiguales: “No estamos en contra de la competencia, eso es mentira. El problema es que nosotros tenemos un montón de impuestos y estamos compitiendo con genteque no tributa nada, que no está habilitada, que no tiene seguro contra personas transportadas como nosotros, que no tiene VTV dos veces al año, ni carnet profesional”.
A su vez, confirmó que los choferes de estas aplicaciones hacen dumping, bajando las tarifas al 100% para “quedarse con el mercado”. Por otra parte, Miguel señaló que esta situación no solo afecta al sector de taxis y remises, sino a todo el sistema de transporte público: “Están destruyendo no solo al taxi, sino también a los colectivos. Un viaje de 40 cuadras lo hacen por $2.000, y un boleto sale $1.000 y pico. ¿Quién va a esperar el bondi si cuesta lo mismo? Destruyen todo el sistema de transporte de pasajeros”. Por último, agregó: “Antes había 2.147 taxis. Hoy, con suerte, quedamos 1.300. Hay 800 o 1.000 autos que ya no trabajan. La gente bajó los brazos. Es muy difícil seguir así”.
Uno de estos casos es el de Fabián, “el pan a la mesa lo tengo que llevar igual, incluso haciendo algo con lo que no estoy de acuerdo”. Además, confirmó que no es un caso aislado: “Acá en Mar del Plata hay un montón de choferes haciendo de Uber, y hay cierta comprensión en esos casos, al fin y al cabo somos todos trabajadores”.
En líneas generales, el transporte tanto público como privado en Mar del Plata está atravesando un conflicto entre los continuos aumentos de tarifas y el deterioro del servicio, las concesiones vencidas sin un pliego renovado, los subsidios que no alcanzan y la falta de un control efectivo sobre las apps de movilidad. Los usuarios deltransporte público denuncian demoras constantes, unidades en mal estado, falta de limpieza y subas indiscriminadas. Por su parte, los choferes de taxi reclaman más apoyo estatal para poder sostener sus puestos de trabajo y hacerle frente a las aplicaciones de transporte que no cuentan con la misma carga impositiva y regulatoria que ellos.
*Estudiantes del MediaLab, primer Laboratorio de Redacción para Medios Digitales. Se trata de un sistema experimental que consiste en el trabajo periodístico, de producción propia, que desarrollan alumnos del Taller de Redacción para Medios Digitales, correspondiente a la Tecnicatura de Periodismo Digital que se dicta en la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales de la Universidad Nacional de Mar del Plata.
