Clínicas: “Los espacios libres son contados”
A pesar de las nuevas restricciones impuestas por la fase 3, la situación sanitaria en Mar del Plata continúa siendo crítica. “Las clínicas están al límite de espacios donde se pueden atender a los pacientes”, así lo explicó el Dr. Gustavo Elicabe, Presidente de FECLIBA del Distrito IX, este jueves en el programa “El día D” que se emite por Canal Universidad.
Con respecto a las incompatibilidades en el registro de camas, el doctor aseguró que “cuando uno dice 80% de ocupación se refiere a que, si tengo 10 camas, solo 2 están libres. Y si encima tengo 30 pacientes en internación, de los cuales el 10% puede subir a terapia, ya estoy teniendo los espacios contados y mínimos“.
No habíamos visto esta situación antes, ni siquiera en la gripe A del 2009.
De acuerdo a las limitaciones que posee cada clínica, Elicabe aseveró que “hay lugares de internación que son lugares de mediana complejidad, “piso”, donde atienden médicos clínicos e infectólogos y hay lugares de alta complejidad que son las terapias intensivas. No todo el personal de salud está destinado ni puede atender a pacientes con covid porque tienen otras especialidades que no se aplican a dicha área. Hay áreas de terapia que son de aislamiento y otras que no, no se pueden mezclar ni se pueden contabilizar“.
Si bien se hace mucho hincapié en el nivel de ocupación de las camas de terapia intensiva, el presidente de FECLIBA planteó que “hay que medir la ocupación de los lugares donde se pueden internar y esto quiere decir que cada institución decide los espacios físicos, los materiales y los recursos humanos de los que dispone. A veces se habla de camas pero las camas son muebles, tenemos que hablar de lugares de atención de los pacientes que enfrentan esta enfermedad”.
La leve disminución de la cantidad de casos positivos en la ciudad “se ha notado esta semana en la presión que estamos teniendo hoy en las guardias: un poco menos de consultas y algunas camas que se han liberado” afirmó.
Sin embargo, la situación sanitaria puede cambiar en cuestión de horas y así ocurre a lo largo de la semana. “Hay días de la semana que estábamos en 80% de ocupación y durante el fin de semana parecía que todo el mundo se había venido a atender, el viernes la situación era bastante dramática” confirmó Elicabe.
El fin de semana que quebró el sistema
Durante toda la pandemia hemos visto noticias europeas donde las clínicas tenían que elegir a qué paciente atender primero. Sin ir más lejos, esta situación se vivió en los centros de internación marplatenses durante el fin de semana.
“Las personas iban de una institución a otra y había que seleccionarlos de acuerdo al tipo de paciente. Había una clínica que tenía una cama de internación y otra que tenía una de terapia intensiva. Entonces, si el paciente presentaba una gravedad para terapia pero solo había camas de internación, no se lo podía internar porque si la situación se complicaba no había lugar para atenderlo” aseguró Elicabe.
La crisis del fin de semana repercutió en los espacios de atención disponibles: “las áreas de terapia intensiva estaban casi completas y todas arriba del 80%. Las áreas de internación de piso estaban muy por encima del 80%, en algunos lugares no había camas disponibles y se estaban utilizando camas de la guardia o de consultorio” remarcó el doctor.
¿Cuántas “camas” hay?
Según el informe realizado por el portal Bacap, las camas totales en Mar del Plata son 1539, hay 146 respiradores y 115 Unidades de Terapia Intensiva (UTI), de acuerdo a los datos proporcionados por la Municipalidad de General Pueyrredon. A este número, se le debe agregar 24 camas de terapia intensiva en el Hospital Modular, construido específicamente para atender casos de coronavirus, y otras 9 del refuerzo por la temporada. Sin contar el sanatorio Bernardo Houssay que no hizo públicos los datos.
En la misma publicación exponen un relevamiento realizado en octubre donde se reflejó que en la ciudad había 260 camas de internación cada 100 mil habitantes. Con el avance de la pandemia y ante la inminente llegada de la segunda ola, a las 1539 camas existentes hasta ese momento, solamente se agregaron 9 de la Unidad de Refuerzo Sanitario que se construyó en la temporada de verano. Aquí es cuando vuelve a surgir la pregunta: ¿está preparado el sistema sanitario?
