Alerta en el mar: «hay más partículas de plásticos que organismos planctónicos»

 

 

La contaminación provocada por los microplásticos es una realidad tanto en el mar como en la tierra de la ciudad de Mar del Plata, y los efectos que produce podrían ser irreversibles. “No solo nos puede afectar del lado de que podemos consumir alimento que haya estado en contacto con plástico y contaminantes sino que puede tener un impacto mayor a nivel ecológico”, expuso Rosana Di Mauro, investigadora del INIDEP.

Investigadores del Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), tienen como objetivo conocer que hay en el ambiente, cuáles son los animales más vulnerables al ingerir accidentalmente microplásticos y cuáles son las estrategias que pueden realizar para prevenir que el mismo llegue al mar. En base a esto la investigadora comentó “hay más partículas de plásticos que organismos planctónicos”.

Los especialistas se encuentran realizando muestreos de agua para determinar qué partículas existen. «En pruebas que son del fondo del Atlántico Sur hay más de 50 partículas por litro en agua y esa situación la estamos empezando a conocer ahora que tenemos acceso a todas las muestras», dijo Di Mauro.

Específicamente en Mar del Plata, se realizó un análisis en las playas de Constitución, Playa Grande y Punta Mogotes. Se encontraron partículas de plástico de origen primario en Constitución ya que llegan por el desagüe, «hay microplásticos que recién están rotos y hay otros que están degradados hace mucho, están colonizados por bacterias o con superficies muy rugosas. Es una situación que se está dando hace bastante tiempo”, manifestó Rosana.

 

Según explicó la investigadora, el plástico está empezando a mezclarse con la naturaleza, con los animales, “somos el último eslabón de toda esa cadena y todo lo que suceda en los eslabones inferiores nos va a impactar de alguna forma”.

El origen de los contaminantes no son solo las bolsas, el plástico que llega al mar de alguna forma o queda olvidado en la playa, sino que “también el producto textil, la ropa que se lava desprende microfibras y nadie estaba preparado para contenerlo” explicó Di Mauro.

En relación a frenar la situación, destaca que “es difícil porque todo el mar está conectado por lo cual no solo hay lo que nosotros producimos. Es un desafío desde todo punto de vista”.

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