Educación: “Se pierden los lugares donde la infancia podía expresar su autonomía”

 

 

Después de un año marcado por las clases virtuales, la presencialidad había vuelto a formar parte de la vida cotidiana, con sus restricciones y cuidados. Este martes el presidente Alberto Fernández anunció que en el AMBA desde el lunes 19 hasta el viernes 30 los tres niveles educativos deberán volver a la modalidad virtual. Aunque Kicillof informó que en provincia siguen presencialmente, que cierren las escuelas significa un retroceso para los niños y niñas.

El efecto que este hecho causa en los niños y niñas puede ser irreparable a la hora de hablar de relaciones sociales, “después de un año, esta forma de contactarnos con el mundo pasa a ser la regla”, comentaba Lorena Canet Juric, investigadora adjunta del CONICET, especializada en psicología cognitiva y educación.

La especialista hizo hincapié en que existe una relación directa entre el malestar parental y la crisis familiar que se está viviendo. En este contexto en donde los niños y niñas debe aprender desde casa, “les estamos enseñando que estar con el otro está mal, con las medidas impuestas durante la pandemia están cambiando la infancia”, afirmó.

Para la investigadora las escuelas “tienen que ser lo primero en abrir y lo último en cerrar, es un lugar de contención de nuestra infancia”. El año pasado ante el desconocimiento “no teníamos esta voz que tenemos ahora como comunidad”, sostuvo.

las escuelas “tienen que ser lo primero en abrir y lo último en cerrar, es un lugar de contención de nuestra infancia”.

La escuela cumple varias funciones que van más allá del aprendizaje académico estrictamente, es un sitio donde pueden interactuar con sus pares, tienen acceso a alimentos, en los colegios se detectan problemáticas y particularidades que “en el caso de las familias pasan desapercibidas y que se notan cuando el niño está escolarizado”. A la vez, que los niños y niñas necesitan ser autónomos durante su desarrollo de la mirada de los padres y tanto las escuela como los clubes proporcionan eso, “estos lugares donde la infancia podía expresar su autonomía se pierden”.

Lorena comentó que los organismos piensan que no podemos permitirnos pasar el segundo año teniendo un acceso escolar limitado o, incluso, nulo, “no deberíamos escatimar esfuerzos para mantener las escuelas abiertas o deberíamos siempre priorizar la infancia, no invisibilizarla”.

Rol de las familias en la educación virtual

Quienes trabajan desde sus casas tienen que asistir a sus obligaciones laborales y a sus hijos teniendo en cuenta que, lo que se plantea como propuesta escolar, es un niño conectado varias horas. En este caso, agregó, “se tiene que calcular la desigualdad que genera esto porque se tiene que contar con más de un dispositivo electrónico y más aún teniendo en cuenta del acceso a Internet”.

“La persona adecuada para dar el insumo académico es el maestro, porque está formado para eso, porque tiene las herramientas, la paciencia y el tiempo”, declaró.

Lorena se pregunta en qué se ha avanzado durante la pandemia para contener a las infancias, “qué políticas innovadoras tuvimos durante este año donde la infancia ha permanecido oculta en términos de políticas de salud mental infantil y adolescente”.

Por último destacó la importancia de que se transmita una preocupación por la infancia, “hay una lectura de la infancia improvisada y no dialogada con los mismos niños, que son tan ciudadanos como nosotros y merecen ser escuchados”.

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