Gasoducto Néstor Kirchner: ¿Qué impacto real tendrá en la economía argentina?
El 20 de junio se anunció la inauguración del gasoducto Nestor Kirchner, que llevará gas desde la localidad de Tratayén, en la provincia de Neuquén, hasta Salliqueló, en la provincia de Buenos Aires. Para conocer la importancia que tiene esta obra y el impacto que puede tener en la producción y la economía argentina, desde Portal Universidad nos pusimos en contacto con Ricardo Panza, economista y docente.
Sobre este aspecto, Panza afirmó: “Sin lugar a dudas estamos ante lo que puede ser un impulso muy importante para las finanzas del país. Actualmente, en importar gas gastamos dos mil millones de dólares y si se hacen todas las obras necesarias, podemos llegar a tener un saldo positivo de 18 mil millones de dólares en 2030. Si a esto le sumamos exportaciones petroleras, podríamos hablar del segundo escalón en importancia de matriz exportadora, luego de los productos agropecuarios. Es importante destacar que lo que se inauguró es una porción muy chiquita de todo lo que hay que hacer”.
Foto: En amarillo, la primera y segunda etapa del gasoducto Néstor Kirchner. Fuente: Secretaría de Energía.
En cuanto a los detalles técnicos de la obra destacó: “Con la inauguración del 20 de junio se comenzó a llenar. El caño se encuentra vacío, hay que cepillarlo, borrarle impurezas, polvo y suciedad para llenarlo de gas y someterlo a cierta presión. Se está llenando en estos momentos el km 0 a 29 y el 25 de junio se llenará el 29 a 61. Así poco a poco se va a ir llenando, para llegar al 9 de julio con la presión máxima a la localidad de Salliqueló. El camino se inicia en Tratayén y de ahí atraviesa gran parte del país a lo ancho. Más o menos tendrá una presión de 11 millones de metros cúbicos diarios”.
Asimismo, Panza se refirió a la importancia que tiene la obra en materia económica y dijo: “Con esto se reemplazan automáticamente importaciones de gas por 1700 millones de dólares. Son las importaciones que entran en barcos de gas natural licuado (GNL) a través del puerto de La Plata. Después se ahorran otras cuestiones, el hecho de los subsidios en las tarifas que son demasiado caras, sobre todo en el AMBA. En ese aspecto es posible que se ahorren otros 200 millones de dólares adicionales, porque el gas nuestro es más barato que el que importamos. Por eso hoy se arranca un ahorro de 1900 millones de dólares anuales. Si se continúan haciendo obras, prontamente podremos exportar gas a países vecinos y de acá a 2030 podríamos hablar de más 18 mil millones de gas exportado”.
Foto: Ya no será necesario importar el gas licuado que llegaba en barcos al puerto de La Plata. Fuente: Télam.
Sin embargo, para poder llegar a esa situación es imprescindible realizar obras más allá de esta primera etapa. En ese sentido explicó: “Lo más inmediato es revertir el flujo, cambiar las válvulas de orientación. El gasoducto del norte traía gas de Bolivia y ahora va a llevar gas, no a Bolivia pero sí al norte argentino. Para lograr esta conexión hay que hacer un tramo que todavía no está, de Salliqueló a San Gerónimo que es una localidad de Santa Fe y después empalmar con la provincia de Córdoba y de ahí al norte del país. Esos 122 km de gasoducto requieren 760 millones de dólares de los cuales 540 ya están con financiamiento del Banco de Desarrollo de América Latina. El resto tienen que ponerlo empresarios privados y ya están anotados en la lista algunas empresas que van a tener cierta sinergia, como Techint. Cuando termine todo el proceso vamos a tener un 95% de abastecimiento de gas”.
Petróleo, el siguiente paso hacia la soberanía energética
El otro recurso sobre el cual es necesario invertir para poder generan un impacto determinante en la soberanía energética argentina es el petróleo. Sobre el panorama de este recurso de cara a los próximos años Panza destacó: “Vaca Muerta es fundamental para la producción de petróleo. Actualmente se están produciendo aproximadamente 300 mil barriles por día y cuando Vaca Muerta esté completamente activo hacia el 2030, vamos a estar en 1 millón 300 mil barriles diarios durante 30 o 40 años al menos. Las necesidades son las mismas, falta construir oleoductos para mover el combustible. Hay un oleoducto transandino, que exportaría a Chile y uno que es el Oldeval, que va por el Alto Valle de Río Negro. Para realizar estas obras hace falta financiamiento, todavía no hay nada”.
Foto: Vaca Muerta. Fuente: Télam.
“Cuando todo esto se termine, se calcula que en el 2030 vamos a tener la posibilidad de exportar aproximadamente 20 mil millones de dólares en petróleo. 20 millones de petróleo y 18 mil de gas te solucionan muchos de los problemas de endeudamiento externo de la Argentina. Con esta realidad no estaríamos padeciendo los problemas crónicos que tenemos por no haber hecho esto antes”, aseguró.
Finalmente, se refirió a los beneficios que traerá la explotación de estos recursos para el conjunto de la población y expresó: “Las decisiones que se están tomando, de una vez por todas son en el camino correcto. Para que esto redunde en beneficios para la población, tenemos que enfrentarnos a otro tipo de problemas. Es fundamental que el gas y las naftas tengan un precio en consonancia con los precios internacionales porque si no las empresas que administran estos pozos van a buscar la forma de exportarlo y no dejarlo en el mercado interno. Si tengo la posibilidad de venderlo a diez en el mercado externo y el gobierno quiere que se venda a dos en el mercado interno, el problema que va a venir va a ser que se exporta y se deja a nuestra gente sin gas. Esto tiene que ir de la mano de una noción de que algunos bienes y servicios en el país tienen que ser comercializados a precio internacional, porque en definitiva es el precio que debe pagarse por las cosas, respetando el costo asociado a un cuadro tarifario razonable. Caso contrario, las empresas se retiran, no invierten y termina el oleoducto estatizado sin poder aprovecharse su potencial”.
